Londres, 19 feb (Prensa Latina) La defensa de Julian Assange alegó hoy aquí que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ofreció perdonar al fundador de Wikileaks si este negaba la participación de Rusia en la filtración de los correos del Partido Demócrata.
La afirmación la hizo el abogado Edward Fitzgerald en una audiencia administrativa celebrada este miércoles, previo al inicio el lunes próximo en Londres del juicio sobre la solicitud de extradición presentada por Estados Unidos.
Según Fitzgerald, el excongresista republicano Dana Rohrabacher visitó a Assange en la embajada de Ecuador en esta capital en agosto de 2017, y tras asegurarle que estaba allí en nombre de Trump, le ofreció perdonarlo si decía que Rusia no tenía nada que ver con el hackeo de los correos electrónicos publicados por Wikileaks en 2016.
Tras escuchar el alegato de la defensa, la jueza Vanessa Baraitser dijo que esa evidencia sería admitida como parte del caso, aunque con ello no dio por sentado la veracidad de la misma.
Assange, quien compareció a la audiencia
administrativa de este miércoles mediante videoconferencia desde la prisión de máxima seguridad de Belmarsh, en el este de Londres, es reclamado por Estados Unidos desde que el gobierno ecuatoriano lo entregó a las autoridades británicas en abril pasado.
Los fiscales de Washington quieren juzgarlo por haber difundido a través de Wikileaks cientos de miles de documentos secretos de la diplomacia y el Ejército norteamericanos.
De ser entregado a la justicia estadounidense, el periodista australiano podría ser condenado a 175 años de cárcel, como consecuencia de los 18 cargos que se le imputan, y que incluyen desde conspiración para cometer espionaje hasta piratería informática.
La víspera, durante un encuentro con corresponsales extranjeros, el actual director de Wikileaks, Kristin Hrafnsson, alertó que la eventual extradición de Assange no solo pondría en peligro la vida de su colega, sino el futuro del periodismo.
Hrafnsson recalcó que se trata de un caso político para hacerle pagar por haber expuesto los crímenes de guerra y los asesinatos de civiles cometidos por las tropas norteamericanas en Iraq, Afganistán y otros países.
Los parlamentarios australianos George Christensen y Andrew Wilkie, quienes participaron en la rueda de prensa y luego visitaron a su compatriota en la cárcel de Belmarsh, también coincidieron en que se trata de un atentado a la libertad de prensa, por lo que instaron al primer ministro británico, Boris Johnson, a impedir la extradición de Assange.
El juicio comenzará el lunes próximo en el Tribunal de la Corona de Woolwich, una instancia judicial cercana a la prisión, y tras una semana de alegatos, será aplazado hasta el 18 de mayo.